domingo, 12 de agosto de 2007

de mis ñañas y varias otras yerbas

No sé si es que en estos meses se me vinieron los años encima o qué, pero últimamente estoy llena de achaques, de cositas sueltas, de cabos que hay que terminar de atar. Porque ahora ya no se trata de mi bocho enfermo que hay que hacer ver, sino también de mi peso que hay que subir, del colesterol que hay que bajar, del zumbido en el oído que estudiar, de los mareos que hay que tratar, de los mocos que cada dos por tres me tengo que sonar y de mi pie izquiero que me duele que no te cuento y no me deja caminar. Seguro que es todo lo mismo, porque todo responde a lo mismo, al mismo centro operador que es mi cabeza y esta repleta de laberintos restorcidos y oscuros, como cualquier cabeza, pero mientras, la que no para de ir a médicos y hacerse cositas, estudios y pruebas soy yo, yo, que no me banco a los médicos y odio que me hagan siempre las mismas preguntas y que me digan qué hacer. Sobre todo eso, porque ningún médico en esta tierra sabe dominar esa necesidad compulsiva de darte indicaciones y consejos, y estoy harta porque siento que no puedo hacer nada, no puedo hacer actividad física, no puedo escuchar música muy fuerte y no puedo comer alfajores cuando se me de la gana. Esto no es vida, me aburre. Odio ser una vieja con ñañas, porque a veces trato de ser rebelde pero no siempre y no con el suficiente ahínco como para dejar de obedecer al que sabe. Y entonces me despierto temprano después de haber dormido poco y mal porque el remedio cada ocho horas me obsesiona y no me deja descansar y para colmo el cana botón de mi celular que suena para avisarme que es la hora de la pastillita para el mareo. Entonces me despierto, muchas veces antes de que haya sonado, antes y a cualquier hora me despierto y no puedo seguir durmiendo y digo puta, ahora qué hago, no tengo nada que hacer, qué mal me sienta el ocio, no sé descansar, no sé poner el freno. Me despierto, decía, y no tengo nada que hacer, o eso siento. Ni leer puedo, porque además de estar llena de achaques estoy llena de manías y no puedo leer un libro si dejé otro a medio camino, no puedo empezar nada nuevo si no sé qué hacer con The Waves, que por segunda vez me supera o me desapasiona. Y decidir me cuesta, entonces no sé si hacer el esfuerzo y leer las 50 páginas que me quedan o cerrarlo y confiar en eso que dicen de que la tercera es la vencida. Creo que lo mejor es dejarlo, pero qué empezar. No estoy inspirada últimamente, soy una vieja achacosa sosa desinspirada desapasionada y aburrida. Pero no es mi culpa. O al menos eso quiero pensar. No es mi culpa porque antes de verme en este torbellino de ñañas y de médicos y de formularios, porque ir al médico implica dar datos y firmar algo, había decidido esforzarme por revertir este año que viene siendo tan, tan, tan largo y divertirme y darle al 2007 una trompada en la cara porque a mi ningún año me pasa por encima, no señor. Pero a veces es una paja. A veces es mucho más facil ovillarse en la cama y esperar a que venga el médico y te cure y que pase el tiempo y lo resuelva todo.

Ningún agosto se me había ocurrido que el trecho hasta las vacaciones podía ser una calamidad, una carrera de obstáculos tan larga y tediosa. Como un paseo en catamarán con el camino repleto de icebergs pero sin sexo con Leo en la bodega en un auto modelo 1910.

6 comentarios:

r dijo...

Un paseo en catamaran por el delta humedo, engotado -engorroso-, lleno de mosquitos e islotes de barro y arenisca. Un paseo en lancha colectivo lleno de valijas y olor a paty refrito recalentado y calor humedo de ribera porteña de 14 de enero a las doce y treinta-i-dos minutos.

Si chorrea mucosidad y estornuda mucho sin estar refriada quiza tenga rinitis cronica (tal era mi caso). Hay remedios que, tras una diaria ingesta o inspiracion, la dejaran como nueva.

Yoshimi dijo...

Tal vez su cuerpo se haya puesto al día con su edad mental.
Ahora es una vieja de 80 completa.

Yoshimi dijo...

le deseo un 2007 no tan tortuoso

angeles dijo...

No me trates de usted, mocosa, ¡te voy a dar un soplamocos!

fede té dijo...

¿se tratan de usted para fingir respeto o para fingir que son dignas de él?

la respuesta es deshacer el ovillo
ocupar la mente
ajetrear el cuerpo
hasta que diga basta, y seas una intelectual en un spa budista, todo pago por tus derechos de autor

r dijo...

Yo trato de usted desde el viernes 25 de mayo de 2007 , dia que entre en Blogolandia (sic. Daniel Link. ver Carrera de Letras, ver http://linkillo.blogspot.com/)y decidi escribir " No juzgue, lector compañero, la calidad del escrito, es un simple borrador de vivencia".
La interpelacion en clave poco porteña no responde a la pretencion de respeto (¿porque habria de fingirlo si se puede pretenderlo?) sino a un simple mecanismo psiquico que puedo identificar del todo (sera tema para tratar en terapia).

Usted no parece de 80, le falta un "je ne se pa" propio de la edad. La gente cuando envejece es mas facha. Le faltaria, señorita angeles, para alcanzar las ocho decadas,escribir en su blog un poco de critica a los "zurditos" de su facultad.