-Digame doctor, esta enfermedad incurable...¿cómo me la pude haber agarrado?
-Y...hay muchas razones...tal vez por el bla bla, o el bla bla bla. También ocurre en adolescentes que han sufrido alguna situación estresante y sus defensas bajaron.
En ese momento mis ojos se llenaron de lágrimas, el doctor cerró la puerta y me juró que su consultorio era tan hermético como un confesionario.
Cuando llegué a mi casa me encontré con mi mamá y lloré mucho. Ella no sabía que la enfermedad no era lo único que lloraba.
9 comentarios:
¡¿QUE ENFERMEDAD INCURABLE?!
(en este blog lloran mucho, no?)
es algo grave?
Epa. Se ve que no anduve muy atento ni en el viaje ni estos días.
¿Le contaste al dotor?
Ay, miji, espero que ahora en aikido te estén dando una re paliza y puedas sacar todo eso feo de lo que te llenaste. También tenés que llorar y depurarte, no hay cosa como eso.
que alguien me diga que la enfermedad incurable es amor. No quiero ningun deceso en mi blogolandia conocida.
no es nada mortal, no se tienen que preocupar.
Y no, Ri, no es amor. No soy tan cursi, ni por asomo.
obvio que no le conté al dotor
Ah!, menos mal. Me había preocupado.
Peroo... como osea
La violo?
Muy Lindo Blog.
Beso
Publicar un comentario